Ahora son las olimpiadas. De niño soñaba con ser olímpico: primero de baloncesto, cuando me di cuenta que era el niño más bajo de la clase me decidí por el tenis pero mi derecha se estrellaba a menudo en la red. Después pensé que podía ser un buen nadador, pero me daba miedo tragar agua en el volteo.
Me gustaba imaginarme que me colgaban una medalla en el podio mientras sonoba el aburrido himno de españa sin letra. Un himno sin letra, qué pais... sólo tararear.
En fin, que a mis casis treinta he perdido toda esperanza de ser olímpico, pero me da igual. Bueno, no... me gustaría ser de los que van y no tienen ninguna opción a medalla y pueden ponerse hasta el culo de pato laqueado y arroz frito tres delicias y rollitos de primavera aceitosos y licor de jazmín y sopa de aleta de tiburón... Además saldría todas las noches por la Villa Olímpica de juerga a practicar inglés, chino, francés y griego y español y checo y catalán y gallego sin miedo a meterse una dosis de EPO, coca, absenta o ketamina. Volvería ebrio al amanecer imaginando que soy el hombre que manejaba el mundo y que poseía todas las calles y plazas... Sería un olímpico golfo, con barriga y bigote y granos, calvo y con halitosis, un olímpico que diera vergüenza a mis conciudadanos. Pero olímpico al fin y al cabo.
Disfrazan el olimpismo de democracia y transparencia, pero no deja de ser un club elitista del que forman parte las más antiguas monarquías, adinerados banqueros y nobles empresarios. Los únicos perjudicados de este snobismo son la mayor parte de los deportistas que compiten y que no ganan una medalla o que se dopan o que se lesionan y las personas que desperdician su agosto delante del televisor viendo como países con pocas garantías democráticas se cuelgan medallas sin parar. Las olimpiadas son así, una mierda menos para quien las gana.
2 comentarios:
En mi casa mi hermana era "la guapa" y yo..."la alta". ¡Seguro que te gustará el baloncesto! a lo que yo muy "asquerosamente" contestaba... pues no, ¡el fútbol!. Miles de recuerdos se me han agolpado en la cabeza al leer tus primeras líneas. Seguro que cada un tiene sus historias relacionadas con la niñez y la infancia. En algo tenías que destacar ¿no? yo la única medalla que gané fue en la prueba de "resistencia" en los juegos escolares (casi reviento pero la gané). Aunque recuerdo más el detalle de que mis padres prefirieron ir a comprar al Alcampo y casi no llegan ni a buscarme... Las películas americanas de serie B han hecho mucho daño a la humanidad... puf! mejor lo dejo porque esto casi parece otro post.
Besico a mi Capitán.
¡Que grande eres!
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