Elena: Salí del cine como elevada, sin duda la belleza de las imágenes supongo que combinadas con la música provocaron tal efecto. Pero si me preguntan de qué va, no sé si sabría responder: la banalidad de la vida o la esencia de la misma, creo que si había algo que entender desde luego yo no lo entendí.
Ojal_a: Salí del cine sin tocar el suelo. Yo no es que no entendiera todo como mi gran amiga Elena (let's be friends...), es que como le he dicho muchas veces, me importa un huevo de pato el no entender. No siento la necesidad de tener todo bajo control y si algo me gusta en el cine, es que me dejen con la boca abierta. Y no, no hacen falta grandes efectos especiales para esto, solo un torrente de imágenes como el que tiene La Gran Belleza, una música apropiada y un guión que deje al menos tantas cosas en el aire como las que cuenta.
¿Cómo volver a escuchar Raffaella sin acordarse del cumpleaños de Jep Bambardella? ¿y como apartar de tu mente a Ramona vestida con su mono de fiesta cuando pienses en la elegancia?. Excesiva, Felliniana, provocadora, ingeniosa, imprescindible.
Jaguaryu: Ni elevada ni extasiada me quedé yo, pero si, me encantó, y si había algo que entender, que después de leer lo anterior igual no era necesario y me empeño en complicarme la vida, lo que vi fue la soledad de un montón de personajes disfrazada de opulencia y exceso, que se hacen compañía los unos a los otros entre resaca y resaca en un ático brutal con vistas al Coliseo.
Allá voy: con la boca abierta toda la peli estuve, entre fiesta y fiesta se vive bien, hasta las resacas tenían cierta alegría. Ramona y su mono dorado espectacular, ese hombre siempre impecable con sus chaquetas y camisas bien planchadas, da igual q esté bailando a Raffaela que haciendo el trenecito qu nunca llega a ningún sitio. La Sor acartonada a mi me sobró aunq merece la pena aguantarla por ver esos flamencos de cerca.
Yo todavía estoy rumiando la peli a varios días de verla pero esas terrazas romanas cerca del Coliseo ¡¡¡bien valen una fiesta!!!