martes, 29 de mayo de 2012

¡Grande Rafaella!

No se sabe muy bien si esto es un cortometraje musical, una pieza de una opera glam... o simplemente el futuro según Rafaella. Un futuro en el que por supuesto hay mallas color carne, collarines metalizados, maquillajes a lo Bowie y coreografias imposibles. Esta vez in inglis, siempre #ojiplaticos rendidos a sus pies.



domingo, 27 de mayo de 2012

No, no puedes


No puedes escribir todos los domingos algo deprimente. No puedes ser la Maruja Torres del cyberpesimismo y la derrota dominical. Lamentarse es de el género bobo. Los principios perduran, las fórmulas no. Además esta semana estoy con Magris cuando dice eso de no siento pesimismo ante el futuro ni nostalgia del pasado. Te lo comes con patatas. A lo pobre. ¿Y entonces la semana qué? bien. Montaña rusa. Descenso a los infiernos cinematográficos gracias a Shame. Chicos echaré de menos las tertulias etílico-cinéfilas. Casi todo el correo electrónico que me llega va a la papelera sin leerlo. Grabado y chapas. La idea del monasterio sigue allí. Sigue probando suerte. Papeleos, sudor, cumpleaños y Valdespartera. Que paz. Que luz. Concierto de viernes, al que no puedo ir. Eurovisión pegado a un grupo de WhatsApp. Creo que no veía el festival entero desde hace 25 años. Disfrute como un enano. No llegue a la micropoesía. Pero este es el único Ajo que me gusta. Esto supera la ficción, debe de ser la realidad. Me he comprado en un Sabeco-saldo el juego del Profesor Layton. El que tenía pirateado se calaba (vocabulario de mi sobrino) siempre al llegar al mismo puzzle. Ahora estoy recuperando el tiempo perdido. Al menos en algo. Amigos, churros y perros. Fiestas del barrio. Creo que ha tocado todos los días Olga y los ministriles. O puede que no.

jueves, 24 de mayo de 2012

El viernes... ¡concierto!


El cuadro original que conforma el cartel anunciador del concierto se encuentra en el comercio oscense La Confianza y según cuenta María Jesús Sanvicente, su propietaria, fue adquirido a un pintor ambulante que pasaba por el Pirineo en los años 50.

lunes, 21 de mayo de 2012

A mis brazos


¡Eyh que ya lo he recuperado! pobrecico mío. Después de rescatarlo de una charity londinense, ahora tocaba un segundo rescate. Del patio del vecino de abajo. Creo que lo han lavado porque huele a leña de otro hogar. Pero yo le quiero igual. Por cierto queda pendiente fijarle el nombre... ¿alguna propuesta?

sábado, 19 de mayo de 2012

A veces lo veo todo claro

Yo descubrí esa línea en tu espalda

Mi estupidez es ilimitada. Siempre lo intuí, no puedo decir que me sorprenda. No hay Micro que valga. Ceno viendo El Apartamento y me oigo pronunciar en voz en alta la promesa de probar el Daikiri helado, antes de ingresar en el monasterio. Esta tarde cuando el sol ya se ponía he descubierto una fila de hormigas por mi cocina. Las miro con envidia marchar en su ordenada existencia. Hasta que en un brote colérico decidido barrerlas. Salgo a buscar la escoba justo en el momento que se desata la tormenta. Acato el rugido protector y decido seguir con con la Ley 12/2001 del 2 de julio, de la infancia y la adolescencia en Aragón. One of the best musical comedies of our times. No lo dice la ley, si no François de la Rochefoucauld (s. XVII) pero; es más vergonzoso desconfiar de los amigos que ser engañado por ellos. Hablo con ella y siento una profunda afinidad generacional. Generación desnortada. Después estaban todas esas gaitas. Facebook ya está en Wall Street y yo sigo sin tener un perfil. Ni un frontal. Por no tener no tengo ni siquiera una opinión formada sobre los snacks japoneses, o chinos que ahora todo es chino… hasta lo japonés. A single man. El Twitter y el Apalabrados son mis mayores vínculos con la sociedad estos días, en los que paradójicamente Grecia puede cambiar la pregunta. En el Babelia del sábado pasado leo que: cambiar de respuesta es evolución, cambiar de pregunta es revolución. Por la ventana se cuela la música de las atracciones infantiles. Son las fiestas del barrio. Intento terminar de leer las reflexiones de Gil Calvo sobre el pesimismo que desata la crisis, pero el pesimismo me puede. Vete a la ducha. Ponte a silbar. 

jueves, 10 de mayo de 2012

Clausurando el club del #cineclú

Con la llegada del buen tiempo cambia el ciclo. Esto de caña-tapa, cine, búsqueda de bar de acogida y caña-tertulia, se acaba. Ha sido una temporada muy entretenida. Variada. Y entre ellas no podía faltar la imprescindible ración de Kaurismäki. Otra de perdedores. Sí. Otra vez vendiéndonos falsas esperanzas. Sí. Otra vez confiando en la bondad universal de los desheredados. Sí. Otra vez una película suspendida en un no lugar. Sí. En un no tiempo. Sí. Otra vez un conjunto de personajes incapaces de expresar sus sentimientos. Sí. Incapaces de tocarse. Sí. De sonreír. Sí. Una película inteligente de humor corrosivo. Sí. Otro retrato de una Finlandia inhóspita. No, esta vez es Francia. Pero no importa. ¿Había temazo musical?pues claro. Una película que no pretende dar lecciones de nada, a nadie. Sí. Aki Kaurismäki tiene uno de esos cines que se reconocen a distancia. Unas puestas en escena llevadas al extremo, unos personajes con severas amputaciones emocionales, capaces de devolverte el reflejo de muchos de tus actos. Gracias Mr. Kaurismäki. Gracias Peña Zoiti. Gracias Teatro Olimpia. Gracias compañeros del club del cineclú. El próximo martes… ¡la última!.

jueves, 3 de mayo de 2012

Patatas al rescoldo

Segundo asalto de nuestras cenas monográficas dedicadas a la superación de la crisis a base de Sardinas de Cubo. En esta ocasión y después de una ardua labor de investigación gastronómica, nos decidimos por una receta procedente de las montañas del norte de la provincia. Una receta que originalmente se hace con brasas, cerquica del hogar... pero que nosotros hicimos como pudimos.

Imagen cortesía de Rqlcas

Patatas al rescoldo.

  • Ingredientes: Sardinas de cubo, patatas, cebolla, pimientos, una pizca de sal y un poco de aceite
  • Preparación: Se limpian las sardinas de cubo y se dejan macerando con aceite. Al mismo tiempo (y con el horno ya caliente, caliente, eeeeeeeo), se meten las patatas envueltas en papel de aluminio, también conocido como papeldalbal durante una hora y media. Mientras tanto aprovechamos para hacer alguna cosilla por la casa. Cuando se acerca la hora de la cena cogemos la cebolla y la metemos en agua hirviendo unos segundos, para asustarla. Ha llegado el momento de emplatar, así que en una ensaladera se coloca la patata cortada, las sardinas a trozos, la cebolla y el pimiento rojo (asado) a tiras y se aliña al gusto.
  • ¡Buen provecho!
Próximamente ¡más! pero no sabemos si mejor...