El evento más transfronterizo en el siglo XXI no es la renovación del tratado de vecindad sino La Feria del Queso en Etsaut.
No hay evento al otro lado de la frontera que movilice a tantos españolitos de a pie.
Me atrevería a decir incluso que es el único día en el que todos nos sentimos a gusto mezclados, en el que no te importa pegar un berrido desde la otra punta y nadie se mira extrañado.
Incluso pillamos a los franceses en un desliz comiendo a las tres de a tarde ¿o quizá estaban merandando?. Fuera lo que fuese la jornada fue de lo más interesante, divertida y productiva.
Hubo encuentros que pronto se convertirán en jornadas a lo "opus dei" ya que la tradición y la familia para nosotros también es lo más importante.
Un pensamiento común sucumbió a la Canfranc Connection. Fue muy fácil coincidir. En la barra del bar... en la de arriba o en la de abajo. Pintores, actores, hermanos, primos, parejas, amores, artistas, portuguesas, abuelos, blogueros ... Unos veinticinco a voz alzada me salen y me dejo un montón, seguro.
Cervecita, queso, vino, café ... Risas y besos inesperados
Terminé el día con una sonrisa y un agotamiento enorme. Fue en ese momento cuando caí en la cuenta de que tal día como aquel, 9 años antes, yo había aparecido por estos lares. Allá por el 99.