miércoles, 19 de agosto de 2009

At home, no home

A veces me gustaría retroceder en el tiempo. No un mes, ni un año, sino volver a aquellos días en los que, a pesar de las carencias, eran otros tiempos.

A veces querría mirar hacia arriba y que el tejado se mantuviera en su sitio, y que las nubes se alejaran y la tormenta no dejara que el agua se filtrara a través de cada una de tus rendijas. Que con tan sólo un soplido todo el polvo acumulado desapareciera. Que con un simple chasquido los trastos se reorganizaran.

A veces sueño con que todo esto ya ha pasado, que he reconstruido mis cimientos, y que por fin, esta pesadilla ha terminado.

7 comentarios:

eleni dijo...

Y pasará...porque todo pasa, lo bueno y lo malo, aunque a veces lo olvidemos.
Besos

Almus dijo...

Piensa en que un dia ese tejado ya no sera tuyo y podras visitar amigas perdidas en el caribe... O lo que te de la gana!!

Pilara dijo...

Siiiiiiiiiiiiiiiiiii, porque en el caribe te espero con un abrazo gigaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaante!

Anónimo dijo...

Por muy larga que sea la tormenta, el sol siempre vuelve a brillar entre las nubes. (Khalil Gibran)

ojal-a dijo...

El hogar, como el tejado, están arriba del todo. En la cabeza. O eso creo.
Ánimo con el chasquido de dedos de este fin de semana.

paula y erika dijo...

te queremos tieta

Hembra Beta dijo...

La única que puede hacer lo del chasquido es Mary Poppins y no existe. Yo si quieres te ayudo a decir "supercalifragilisticoespialidoso"... Besote.